El jueves fue uno de esos tres jueves que relucen mas que el sol a los que los sucesivos gobiernos han quitado su esplendor y su brillo.También era el cumpleaños de mi hija Isabel.Yo quería hacerle un regalo bonito,algo que vengo haciendo desde hace varios años en mi espacio de live,pero no encontraba el momento nunca para escribir unas líneas de felicitación adornadas con alguna foto de lacasitos festivos.
Volviendo al inicio,hoy ha sido cuando la Iglesia ha celebrado la Ascensión de Nuestro Señor a los cielos.
Hacia dos o tres años ya que una adolescente con un carácter fuerte y ,a veces,poco moldeable,me había dicho que no estaba segura de creer,que no quería ir a la Iglesia mas.Yo hice un amago de discutir con ella pero me frene en seco y solo le dije:”hasta que no tengas 18 años iras a la iglesia conmigo cada domingo,y eso no es discutible”.
Quizá le di alguna explicación mas de por que yo tomaba las decisiones y ella las acataba,pero no creo que en aquel entonces ella me escuchara demasiado y por supuesto no estaba nada convencida de hacerme caso.Sin embargo,desde entonces,cada domingo ha venido a la iglesia a veces con menos ganas y a veces con mas protestas.Pero ha venido!
Sus recién estrenados 18 años le daban carta de libertad en lo que a religión se refiere,porque ese fue el plazo que yo le di.
Hoy(ya ayer),me siento a “escribir” su regalo y mi alegría ha sido ella la que me ha hecho a mi el regalo por su cumpleaños.En nuestra misa dominical allí estaba ella,de pie a mi lado,mirándome con ternura , rezando las oraciones y escuchando la Palabra que es el alimento de nuestra alma.
GRACIAS HIJA, el regalo de tu 18 cumpleaños has sido tu quien lo has hecho,y no sabes como me siento de orgullosa de ti!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario